Salmón con Pesto.

Hace un tiempo, un par de meses ya, ambos teníamos ganas de comer un pescadito y, mientras estaba almorzando veía un programa de cocina y lo vi: un rico pescado relleno con una especie de pesto. Inmediatamente supe que esa iba a ser la receta que íbamos a cocinar en la noche. Faltaba elegir el pescado y el elegido fue el salmón, que me había estado dando vueltas por la cabeza por un tiempo, igual que lo hace ahora el atún (aunque claro, es algo un poco harto más caro que el salmón).

Hasta ahí todo fácil. Pero claro, eso no podría ser, ya que si bien estaba desde temprano decidido qué cocinar, la hora para ir a comprar los ingredientes tardó bastante en llegar, ya ni recuerdo por qué. Pero la cosa es que llegamos como a las 10 al supermercado, tiramos al carro todo lo que teníamos que comprar, excepto las anchoas que salían como 3 lucas los 100gr, literalmente, después de perder como 5 minutos buscando. Y, entre medio, ya habían llamado a las cajas porque se estaba cerrando el supermercado y nosotros todavía sin el salmón en las manos . Nos dirigimos hacia el sector de los pescados y vimos que no había mucho, es más, estaban retirando todo ya, descongelando y limpiando. Con eso, nuestro plato se había ido a la M. Acto seguido fui a buscar pedazos congelados de salmón, que claramente no es lo mismo, y la Maida fue a ver si podía conseguirse un par de filetes. Un par de minutos después había cuatro filetes en nuestras manos, elegimos dos, corrimos a las cajas con – casi – todo, pagamos y nos fuimos a cocinar.

Llegamos a la casa como a las 10:45pm, así que debemos haber comido como a las 11:20-11:30. Bueh, acá va la receta:

Ingredientes:

• 2 Filetes de Salmón Frescos
• Cuerda para amarrar el pescado
• 1 puñados de cilantro bien gorditos
• 2 puñados de albahaca
• 1 diente de ajo, pelado
• 75g de almendras, sin cáscaras
• 1 limón
• Aceite de Oliva
• 150gr de queso parmesano (compren el queso parmesano, no rallado). Aunque originalmente es queso de cabra (más $$$).
• 300gr de tomate, ojalá cherry (más $$$).
• 3 de anchoas (más $$$).

Pasos:

Ahora que tienen todo, deben seguir estos siguientes simples pasos para hacer un rico pescadito.

1.- Precalienten el horno a 200°C

2.- Saquen una licuadora, la 1,2,3, un procesador, lo que tengan.

3.- Pelen el ajo y corten los tallos del cilantro. Lávenlo junto a la albahaca. Corten el queso de manera fina o ráyenlo. También aprovechen de rayar un limón.

4.-Tiren el ajo, albahaca, cilantro y almendras al procesador. Si compraron las anchoas también y congelen el resto. Muélanlo y luego agreguen el queso, un poco de jugo de limón, la ralladura. También agreguen un poco de aceite de oliva, sal y pimienta. Muélanlo nuevamente hasta que quede una linda y fragante pasta verde.

5.- Ahora, corten unos pedazos de cuerda y pónganlo en un pyrex o en alguna fuente que puedan poner en el horno, lo suficiente mente largas para poder luego envolver al pescado.

6.- Pongan el filete con la piel hacia la fuente. Viertan el pesto sobre este y luego tápenlo con el otro filete, con la piel hacia arriba. Que quede como un sanguchito y amarren los cordeles.

7.- Ahora pongan los tomatitos cortados alrededor del pescado. Si son cherry, no los corten. Agreguen un poco de aceite de oliva sobre éste y póngalo en el horno. Opcionalmente pueden cubrirlo con papel de aluminio para que guarde el máximo de sabor posible.

8.- Ahora esperen que se cocine. Debiera estar listo entre unos 15 y 20 minutos. No lo tengan demasiado rato en el horno para que el salmón no se seque y pierda esa rica textura, algo oleosa, que tiene.

¡Y listo! Pueden servirlo con arroz salvaje, como lo hicimos nosotros y a disfrutar. La verdad es que es un plato muy sencillo de hacer u bastante bueno. Quedé con las ganas de probar como las anchoas fortalecerían el pesto, cuestión que haré cuando tenga un poco más de presupuesto.