Páginas

martes, 5 de julio de 2011

Sopa de Cebolla (8 Porciones/6-8 Personas)

Con estos fríos, a quién no le gusta una rica sopita. Es por eso que hace rato ya, antes que comenzara la famosa “ola polar”, hicimos una exquisita sopa. ¡Increíble lo dulce que puede quedar sin echar azúcar! A ver, a ver. ¿Qué cosa puede ser? Adivinaron, ¿no?, ¿sí? No, no es eso lo que estás pensando. Si todavía no sabes lo que es y ya viste el título y la foto, eres pero es que muy h#$#n. Sí, ¡sopa de cebolla! Algunos dirán: ¿Pero cómo una sopa de cebolla puede ser dulce, sabrosa y no pasosa? Bueno, la verdad es que puede ser las tres cosas, aunque la tercera es algo debatible.

Así que, qué diantres se necesita para hacer esta sopita y nos intente quitarnos el frío. Bueno, en primer lugar, cebolla, ¡dah! Basta de rodeos, aquí va la receta:

Ingredientes:

  • Una buena cucharada de mantequilla/margarina
  • Aceite de oliva (También puede ser vegetal, de maravilla, soya, etc. No sean tacaños)
  • Un puñado de hojas de salvia. Y 8 hojas para servir.
  • 3-6 dientes de ajo, molidos. Depende de qué tan juerte les guste.
  • 3-5 cebollas moradas, medianas. Peladitas y cortadas juliana.
  • 3 cebollas normales, grandes. Peladas y cortadas juliana.
  • 300g de puerro. Aproximadamente 2 “ramas”. Cortado fino.
  • Chalotes o algún otro tipo de cebolla que tengan a mano. Entre más diverso mejor.
  • 2 litros de caldo, cualquiera sirve.
  • Unas lindas rebanadas de pan. 4-8 para servir al final.
  • 8 láminas de Queso Cheddar o 200g rallado.
  • Salsa inglesa

Wow, pero qué cantidad de ingredientes. Ahora pensaran, ¿puerro?, ¿salvia? Sí, hacen una gran diferencia. La primera vez que lo hice los incluí, y quedó MA-RA-VI-LLO-SA. Sí, así de sencillo. La segunda vez que lo hice, al día siguiente por petición popular, no me quedaba. Y si bien quedó rica, le faltaba ese toque.

¿Cómo se hace la custión ésta?

Pero elemental mi querido Watson. Plain simple. First of all, put the butter, oil, garlic and sage into a thick olla. Luego, revuélvelo de vez en cuando, que no se queme, y agrega todas las lindas cebollas que espero hayan sacado el lado femenino que hay en ti. Pon el fuego medio, la idea es que las cebollas queden suaves y traslúcidas. Sazonar con sal y pimienta a gusto, ojalá recién molida, y déjalo cocinando por unos lindos 50 minutos tapado. Que no se te olvide revolver cada cierto tiempo. En los últimos 20 minutos, quita la tapa.

Si les parece mucho… están mal. Claramente este es el paso fundamental para que las cebollas queden suaves y dulces. Si se apuran, no les va a quedar igual. Así que tengan paciencia y hagan algo por mientras.

Cuando haya pasado el tiempo, agrégale el caldo, ¡caliente! Espera a que hierva, y déjalo burbujeando (simmer, ¿por qué diablos los gringos tienen palabras infinitamente más específicas que nosotros? A veces cuesta mucho traducirlo) entre 10 a 15 minutos.

Ahora, saca esas fuentecitas de greda que compraron en Pomaire, pégales una limpiadita, y precaliente el horno al máximo. Pon a tostar el pancito (sí, la sopa trae pan y no te van a mirar feo). Ahora vuelve a probar tu linda sopita y échale sal y/o pimienta hasta que digas: ¡Voila! Luego, sírvela en tus 8 pocillos, tápalos con el pan recién tostado, húndelo si quieres. Pon el queso cheddar encima y agrega un poco de salsa inglesa. Casi para finalizar, pon esas hojas de salvia que ya debes tener olvidadas sobre el pan, intenta que se vea lindi, y agrega un poco de aceite de oliva si lo deseas.

Finaaaaaaalmente, introduce las fuentes al horno y espera hasta que el queso esté completamente derretido o inclusive burbujeando. Luego, retíralas del horno y ¡listo!

¡A disfrutar y quitarse el frio!

lunes, 7 de marzo de 2011

Arroz con Pollo Peruano

Bueno, bueno, les presentaré en esta ocasión una rica receta peruana, un clásico… ¡Arroz con Pollo! Pero Uds. Se preguntarán: ¿Qué tiene de especial el arroz con pollo como para escribir una entrada en un blog? Bueno, la respuesta es que en el mes de enero si es que mal no recuerdo estaba tentado en hacer un "curry verde" que al final no quedó muy decente, el cual acompañamos con arroz con leche de coco - que por lo demás queda buenísimo y le da un giro distinto al arroz que uno come diariamente - y le dije a la Maida algo como: "¿Sabes?, con cilantro queda mucho más rico, deberíamos haberle puesto más cilantro al arroz al cocinarlo". Y ¡Paf! (nació chocapic), arroz con cilantro.

Y ahí está la gracia, este arroz con pollo lleva se cocina con una pasta de cilantro y varias otras verduras. Y esas dos cosas lo haces donde cocinaste el pollo, entonces queda todo cremocito, suavecito y los sabores de funden y estallan en nuestro paladar y uno tiene una comida rica y fácil de hacer, aunque algo trabajosa.

Mucha cháchara ya. ¡A la receta! Que es para 6 personas.

¿Qué necesitamos?

  • 1 Pollo entero.
  • ½ paquete de cilantro fresco.
  • 3 cucharaditas (aprox.) de Salsa Inglesa.
  • 4-6 dientes de ajo.
  • Ají a gusto.
  • ½ de jugo de naranja. También puede ser limón o una mezcla como usé yo.
  • 2 tazas de arroz.
  • ½ copa de vino blanco.
  • 2 cebollas picadas finamente.
  • 1 zanahoria grande picada finamente.
  • 1 pimentón rojo.
  • 3 ½ de caldo de pollo
  • Sal y pimienta a sazón.

Eso es todo. Como ven nada complicado de conseguir.


¿Cómo lo hacemos?

Muy muy simple, vamos por pasos:

  1. Trozar el pollo. Si no saben trozarlo… aprendan. A mí me enseñó mi abuela y me recordó internet. ¡Guarden el espinazo e interiores para el caldo!
  2. Sazonar el pollo con algo de sal y HARTA pimienta.
  3. En 2 sartenes calientes, grandecitas (no sean cagones que de ahí en una se hace la pasta de cilantro y en la otra se comienza a hacer el arroz), pongan dos cucharada de aceite en cada una. Dejen que se caliente este último y agreguen las presas en ambos sartenes. Fríanlas hasta que esté doradito. Yo al probar el pollo como había quedado pensé: "Si el arroz queda igual de bueno que este pollo será todo un éxito esto." Y así fue.
  4. No olviden de hacer su caldito de pollo.
  5. Ahora, mientras se fríe el pollo, facilitémonos el trabajo con la tecnología. En un procesador de alimentos agreguen el cilantro – pueden dejar algo de los tallos – previamente lavado, el ajo, el ají, el jugo de naranja o el mix cítrico deseado y la salsa inglesa. Déjenlo en un pocillo.
  6. Corten la cebolla finamente o usen el mismo procesador para hacerlo. Aprovechen también de cortar la zanahoria en rodajas delgadas.
  7. Cuando el pollo esté listo, retírenlo del fuego y NO boten el aceite donde lo cocinaron. ¡Por ningún motivo! En uno de ellos pongan la pasta de cilantro que hicieron, llévenla a un hervor y déjenla a fuego medio por alrededor de 5 minutos o hasta que se ponga de un verde oscuro. Acá su cocina debería estar cubierta de una exquisita fragancia y su guata comenzará a rugir y no podrán evitar hacer "controles de calidad".
  8. En el otro sartén pongan la cebolla picada a freír, también a fuego medio para que no se les queme, entre 5-7 minutos o hasta que esté suavecita y transparente. Cuando ello pase echen el arroz y fríanlo hasta que también esté transparente, alrededor de 5 minutos.
  9. Ahora, con ese vinito blanco que habíamos tenido botado, échenlo en el procesador – yo eché algo más de media taza – y presionen el botoncito un par de veces para soltar cualquier rastro de cilantro, cebolla, ajo, etc. que haya quedado y agréguenlo a la pasta. Esperen que vuelva a hervir.
  10. Acto seguido agreguen el arroz con cebolla, el caldo de pollo y la(s) zanahorias. Dejen nuevamente que llegue al punto de ebullición. Ya estamos terminando. Si no se les ha pasado ya en estos momentos hacer "control de calidad" hay dos opciones: o bien tienen un pésimo olfato en estos momentos (¿resfrío?), o bien algo no han hecho bien y bueh… tendrán que intentarlo de nuevo porque esto no se lo pueden perder.
  11. Ahora agreguen las presas de pollo, péguenle un buen revoltijón, y cocínenlo a fuego lento por alrededor de 30 minutos o hasta que tanto el pollo como el arroz estén totalmente cocinados.
  12. Déjenlo reposar por 5 minutos. Pongan la mesa por mientras, lleven los condimentos, las bebidas, etc.
  13. Finalmente corten el pimentón en rodajas y pónganlo sobre el arroz.

¡Y listo! En estos momentos se me había hecho agua la boca – mientras lo escribo me acuerdo y me da hambre –, se nos había hecho tarde, creo que eran alrededor de las 23.30 y lo único que quería era hincarle el diente. Y cuando lo hice fui feliz y me dije a mi mismo "Misión Cumplida". Porque quedó suave, los sabores se mezclaron perfectamente y ninguno opacaba al otro. Quedó mojadito, tanto el arroz mismo como el pollo… No les sigo dando la lata y pruébenlo ustedes mismos.

¡Provecho!


Receta original: http://allrecipes.com/Recipe/Peruvian-Arroz-con-Pollo/Detail.aspx

martes, 1 de marzo de 2011

BLANQUILLO AL CURRY CON ARROZ


Ayer por la noche, mientras no podía quedarme dormido gracias a el exquisito concierto de ladridos de perro y la acalorada discusión de mis vecinos – ojo que no los del lado, que son los que siempre alego, sino alguno desconocido de las casas aledañas – encendí nuevamente la tele para toparme con un programa donde un chef, Gordon Ramsey, viaja por la India y preparaban un curry de pescado que se veía de lo más tentador y, claramente, me tenté.

Así que surfeando por la internet encontré el almuerzo para 4 personas del día de hoy. Entonces,

¿Qué Necesitamos?


¿Qué creen Uds. que necesita esta cuestión? A ver, díganme...

  • 4 filetes de pescado blanco – Muy bien. Sí, sí. Estoy algo aburrido. Pero qué pueden esperar después de estar ya 2 semanas con movilidad reducida… pfff.

Para marinar el pescado, y no se asusten como mi abuela que dijo: ¡Oh, tanta mostaza! Sí Apila, y si te gustara el pescado habrías notado que no era tanto…

  • 2 cucharadas de mostaza. Juerte mijito, si no se perderá.
  • 1 cucharada de aceite
  • 1 cucharadita de pimienta negra
  • ½ cucharadita de sal

Entonces, con eso tenemos el marinado. ¿Y el curry dónde está? Ya voy, ya voy. Esto será más fácil de lo que uno cree y no se necesita tanta cosa, ¿o sí?

  • 1 cebolla finamente picada
  • 3 ó 4 dientes de ajo, también finamente picados
  • 1 pulgar de jengibre, pelado – ¡Dah! – y picado.
  • ¼ de taza de cilantro picado – Córtenlo con tijeras, es más fácil.
  • 1 tomate
  • Ají a gusto – Yo use la mitad de uno verde tradicional y quedó picantito según mis estándares. Para mi polola picantote.
  • 1 cucharadita de azúcar
  • 1 taza de caldo de verduras
  • Sal y pimienta a gusto.

Y finalmente las especias, lo que hace curry y le da personalidad a este plato

  • 1 cucharadita de semillas de cilantro – Que por desgracia no las pude conseguir, si alguien sabe dónde vende, no dude en dejar un comentario.
  • 1 cucharadita de comino
  • ½ cucharadita de cúrcuma – ¡Ojo con este ingrediente! Si creen que es poco se darán inmediatamente cuenta que no, ya que tiñe completamente y le da el color amarrillo al curry – no todos lo son – e inclusiva le pondría quizás algo menos.

Con todo eso estamos listos. Ahora, manos a la obra.

  1. Primero, échenle una lavadita al pescado. Mezclen todos los ingredientes del marinado en una fuente y embetunen sus filetitos en éste. Métanlos al refri por 30 minutos.
  2. Precalienten el horno.
  3. Ahora la base. Si tienen un procesador de alimentos o la 1, 2, 3, todo será más fácil, ya que deben poner el jengibre, cebolla y ajo en ésta y hacerlos una pasta. Si no, picar a manito no más.
  4. Antes de poner a cocinar el resto, piquen el tomate en cuadritos y el ají chiquitito. Con eso listo, le toca el turno al sartén, si tienen un wok de tamaño mediano o grande, mejor.
  5. Poner una cucharada de aceite en el wok y esperen a que se calienten. Pongan la pasta que hicieron en la procesadora y dejen que se fría durante unos 2 ó 3 minutos. Luego agreguen las especias, el ají, un poco de sal y azúcar – alrededor de una cucharadita de cada una – y cocínenlo por unos 5 minutos. Finalmente, agreguen el caldo de verduras y el tomate. Ya casi terminamos.
  6. Ahora saquen su rico pescado del refri y pónganlo en una fuente para que vaya al horno, vertiendo su rico curry sobre éste.
  7. Cocinar el pescado, tapándolo con alusafoil, por alrededor de 20 minutos.


¡Y voila! El pescado estará listo. Queda tierno y ha absorbido todos los sabores. Así que para servir, poner una base de arroz en el plato y servir el pescado con todo la pastita que preparamos. Finalmente, agreguen algo de ese cilantro que habíamos cortado previamente sobre el pescado y está listo para disfrutar. ¡Provecho!

Y qué me pareció a mí. Bueno, creo que para ser la primera vez que lo cociné quedó bastante bien, 4/5 estrellas. Algo le faltó para que salieran estrellitas para darle las 5 estrellitas, quizás haya sido esas semillas que no pudimos encontrar y seguramente usar jengibre molido en vez de fresco, ya que no quedaba en el Líder, le daría su empujoncito. Pero definitivamente lo haré de nuevo ya que me gustó bastante: ¡me termine comiendo 3 platos!

jueves, 24 de febrero de 2011

Torta de Panqueque Chocolate Naranja


Como se habrán dado cuenta por el título de este blog, me encanta la combinación de chocolate con naranja. Las naranjitas, las tortas, el helado... en fin, lo que sea. Esos dos sabores, uno dulce y cálido y el otro amargo y cítrico por alguna razón se quieren bastante, y funcionan muy bien juntos.

Tomando en cuenta eso, decidí que me tenía
que hacer mi propia torta de cumpleaños, porque nunca he visto que vendan una buena torta de naranja chocolate. Así empezó una odisea que a fin de cuentas, para producir todo lo necesario, duró tres días!

Básicamente, hice cuatro cosas distintas, que después las uní en una maravillosa torta de panqueques:
-Naranjitas confitadas (para decorar y picotear mientras cocinaba), receta cortesía de Closet Cooking
-Masa de panqueques
-Relleno de chocolate
-Relleno de naranja

Para hacer la receta, es necesario tener el relleno listo antes que se empiece a cocinar la masa, porque el proceso requiere que sea rellenada caliente.

Relleno de chocolate:
-300 g de chocolate
-3/4 taza cacao
-750 ml de crema

Se derrite el chocolate, agrega la crema y el cacao y se bate bien.

Relleno de naranja:
-4 naranjas
-ralladura de la cáscara de 2 o 3 naranjas, según que tan amargo se quiera
-2 cucharadas de maicena
-1 taza de azúcar
-3 huevos

Se rallan las naranjas, y luego se pelan y se meten a un procesador o juguera, junto con los huevos, maicena disuelta en un poco de agua y el azúcar.
Esta mezcla luego se cocina hasta que el azúcar esté bien disuelta y la mezcla se haya espesado.
Debería quedar un color parecido a naranja con crema.

Masa de Panqueque
-6 huevos
-300 g harina
-300 g mantequilla o margarina
-300 g azúcar flor
-1 cucharadita polvos de hornear
-1 cucharada de ralladura de naranja
Se bate la margarina con el azúcar hasta que queden suaves y bien mezclados.
Se baten las yemas y se le agregan a la mezcla de azúcar y margarina.
Se baten las claras a nieve y se agregan a la mezcla, alternando con la harina, procurando hacerlo suavemente para que no se desinflen.
Se agregan los polvos de hornear y la ralladura de naranja.
Para hacerlo más facil, se puede refrigerar la mezcla unas horas antes de cocinarla.

Cómo armar la torta

El proceso de armado de la torta es clave. Hay que estar dispuesto a estar un buen rato pendiente del horno, de lavar, enmantequillar y rellenar, ya que todo se tiene que hacer en el instante que la masa está caliente para que no se desarme.

-Precalentar el horno

-Enmantequillar moldes para torta de panqueque (que son así si no los conoces)

-Con un cuchillo, esparcir la masa sobre los moldes de manera uniforme, para que quede más o menos a la altura del borde del molde.

-Meter al horno y esperar hasta que suceda alguna de estas cosas:
-estén levemente dorados los bordes
-la masa se empiece a despegar de los bordes
-parezca cocida y esponjosa
Tener cuidado con que no se pase la masa, porque sino será imposible despegarla y se romperá entera. También, no se puede esperar para sacarla, siempre hay que despegarla mientras está caliente.

-Una vez que esté lista, cuidadosamente despegar con un cuchillo, poner sobre un plato de torta y rellenar altiro.

-Ir alternando las capas de relleno entre naranja y chocolate.

-Después de harto rato, y unas 10 a 14 capas, la torta debería estar lista para decorar.

Lo que yo hice fue bañar la torta en el chocolate que me sobró, la refrigeré, corregí las pifias con una mezcla más chocolatosa y luego rallé chocolate y la cubrí entera.
Luego, le puse unas pocas naranjitas confitadas arriba... y al día siguiente, me cantaron cumpleaños feliz y efectivamente fui feliz comiendo mi rica pero trabajosa creación.


viernes, 4 de febrero de 2011

Patita de Limón (es decir, Pie de Limón)


Bueno, he aquí una simple receta dulce para quienes les gusta lo dulce y lo ácido mezcladito.
Su razón de ser? Simplemente un antojo de cocinar algo para tener postre antes de ir a comer sushi (el más caro de la historia, al parecer).

Ingredientes:

Masa:

1 paquete y medio de galletas de avena (esas bien secas y un tanto desabridas funcionan muy bien)
100 gramos de margarina
3 cucharadas de azucar

Relleno:
1 tarro de leche condensada
1/2 taza de jugo de limón (o a gusto)
4 yemas

Merengue:
1 taza de azúcar
4 claras


Preparación:

Precalentar el horno

1. Masa:
-En un procesador moler las galletas totalmente.
-Agregar margarina y azúcar hasta que queden grumos amoldables.
-Enmantequillar molde de kuchen y poner mezcla como una masa cualquiera.

2. Relleno:
-Mezclar leche condensada, limón y huevos.
-Vertir sobre masa.
-Meter al horno por 10 minutos aprox (hasta que se vea relativamente firme el relleno)

3. Merengue:
- Hacer almibar con 1 taza de azúcar (poner azúcar el olla, mojar hasta que quede toda el azúcar apenas mojada, poner al fuego, sin mover ni revolver hasta que se derrita el azúcar)
-Cuando se vea relativamente derretida el azúcar, empezar a batir las claras a nieve.
-Cuando uno mete una cuchara al almibar y gotea, y finalmente queda un fino pelo, echarselo al merengue y batirlo hasta que se mezcle bien y se enfrie un poco.

4. Sacar la masa del horno y poner merengue sobre el relleno, y luego meter por otros 10 minutos al horno, o hasta que se dore un poco.

5. A disfrutar!

martes, 28 de septiembre de 2010

Cena del Viernes Pasado:

Sí, ¡Por fin salí de un antojo! Pero repito, UN antojo, aún quedan muchos por satisfacer, como el pato cocinado en su propia grasa – mis padres ya me han timado como 5 veces con ir al Café Normandie –. La cosa es que hicimos risotto, en este caso era de champiñones.

La cosa partió, y es, bastante simple. Viernes en mí casa, ociosos mi polola y yo, se dio un diálogo bastante parecido a éste, aunque lejos de toda realidad:

  • ¿Sabes linda? – dije yo con cara de enamorado (y hambriento)
  • ¿Qué cosa amor mío? Dime, que no te detenga ni la vergüenza del temor, mis oídos están siempre dispuestos a escuchar tus dulces palabras
  • Sí, sí. Me lo dices a cada rato. Tengo hambre… hace tiempo que no cocinamos.
  • Pfff… media novedad. Ya, dime. – Me respondieron con violencia.
  • Pero, pero. No te pongas así. Si tú sabes que te quiero y todo esto lo hago únicamente por ti. – Un silencio inundó mi blanca habitación – Bueno, tengo ganas de comer risotto, más que nada para aprender a hacerlo.
  • ¡Yapo! ¿En qué topamos? Vamos.
  • ¡Upa!
  • ¡Chalupa!

Y partimos po. Pero una terrible interrogante se expandió en mi mente como la neblina densa que nos asustó al volver el sábado (¿viernes?) de la fonda (¿o fue el pub?): ¿Dónde comprar los extraños ingredientes? Con dicha duda sobre mi persona pegué una chantada en la bifurcación donde había un cartel que decía con flechas: "Izquierda –Jumbo La Reina; Derecha – Jumbo Los Domínicos". Así que sin la respuesta en mis manos le pregunté a mi (temporal) conciencia: "¿Linda?, tú que nada sabes y por eso todo lo inventas. Dime, dime, a qué Jumbo os debemos dirigir". Mis ojos se encontraron con una mirada dura, como si estuviera invadiendo territorio enemigo o haciendo una pregunta del todo prescindible, y una voz impenetrable emergió de sus lados diciendo: "El de Los Domínicos, así llegamos más rápido a mi casa". Y yo dije: "¡Upa!". "¡Chalupa!", me respondieron. Y metí chala.

Cuando llegamos al Jumbo, supe al momento que había sido una mala elección jumbística: ¡No estaba la promoción de un Jumbito + 500g de arroz para risotto! Es más, no había paquete menor a un kilo ($2.200 mínimo), lo cual, para dos personas, es como un poco mucho. Aparte de eso compramos otros ingredientes los cuales detallo a continuación:

Risotto de Champiñones para 4 Personas:

Ingredientes:

  • 2 tallos de apio, picados fino
  • 1 Cebolla chica, picada fina
  • 400g de Arroz para Risotto (¡Muy distinto del común y corriente!)
  • 1 ó 2 Bandejas de Champiñones (La receta original decía secados, pero se me fue)
  • 1 Bandeja de Champiñones Ostra – u otro diferente a los normales.
  • Perejil
  • 1 Limón.
  • Aceite de Oliva
  • Caldo de Pollo, 1.5Lt
  • Vino Blanco, 400cc
  • Queso Parmesano
  • Mantequilla, 75g.
  • Sal y Pimienta.

Después de comprar lo necesario, que no es muy caro al fin y al cabo, nos dirigimos a la lenta pero placentera:

Preparación:

  1. Primero que nada, siempre es bueno tener todo picado, cortado y lavado antes de comenzar. Así que piquen la cebolla y el apio fino. Aprovechen también de picar las hojas de un manojo de perejil.
  2. Hagan el caldito de pollo, 1.5Lt. Mejor que les sobre a que les falte. NO dejen que se les enfríe, lo usaran en poco tiempo.
  3. Una vez hecho el caldo, poner los champiñones secos sumergidos en el caldo hasta que se ablanden, en ese punto sáquenlos y guarden el caldo en que los remojaron para después. Si fueron pajarones como yo y no leyeron lo de los champiñonessecos, lo que hice fue cortarlos fino y meterlos en el horno eléctrico. Si los compraron, córtenlos después de haberlos sumergido.
  4. Tras aquello, pongan aceite de oliva en una olla – ¡no chica! – y esperen que se caliente. Acto seguido poner a freír la cebolla y apio por unos 10 minutos. NO dejen que se doren – fuego medio es recomendable – y también pueden agregarle un par de gajos de ajo picados.
  5. Cuando haya pasado el tiempo, échenle todo el arroz, fríanlo un poco hasta que empiece a quedar translúcido – tal cual como hacen el arroz común. Agreguen el vino blanco.
  6. En ese momento tiren el caldo de los champiñones, los champiñones secos previamente cortados y la primera de muchas cucharadas de caldo. Agreguen una buena pizca de sal y pimienta a gusto.
  7. Ahora viene la etapa lenta – ¡pero no aburrida! , pueden hacer el paso que sigue, ponerse a bailar con su polol@, lavar las otras cosas, hacer un rico postre, o jugo de naranja natural (que fue nuestra opción) –, ya que deben ir revolviendo con amor el arroz e ir incorporando más caldo para que éste no se seque. ¡QUE NO SE SEQUE! Vayan probando de vez en cuando para verificar el grado de cocción y sazón.
  8. Con los otros champiñones que compraron, córtenlos y ásenlos en éstas sartenes con grill hasta que se emblandezcan. Una vez hecho aquello, agregar el jugo de limón y el perejil que cortaron. ¡Vigilen el arroz!
  9. Cuando el arroz ya esté blando, pero con un poco de consistencia – o bite como dicen los gringos – sáquenlo del fuego, agréguenle la mantequilla y el queso hasta que quede una consistencia cremosa. Si creen que les falta caldo, agreguen más. Hagan una prueba de calidad en cuanto a sal y pimienta y optimícenlo a gusto.
  10. Déjenlo reposar 3 minutos

¡Y voila! La cena está lista. Cómanlo al instante. Agreguen los otros champiñones sobre el risotto para ver lo bien que funciona.

¡Provecho!

Después de comerlo, notamos que la consistencia fue perfecta para nuestro gusto, pero le faltó ese sabor, quizás fue por lo de los champiñones olvidados o que no le echamos ajo, aunque esta última opción es bien poco probable. Pero al fin y al cabo, es una buenísima opción para aprender a hacer este plato y no gastar mucho dinero.

lunes, 13 de septiembre de 2010

Otros Brownies Ma-ra-vi-llo-sos


Bueno, como se habrán dado cuenta, tengo una pequeñísima obsesión con el chocolate, y en particular, los brownies. Nada mejor para alegrar el día que un brownie recién salido del horno, con el centro aún húmedo.
Estos en particular vienen de un buen "amigo" de Cristóbal (uno puede considerar a alguien amigo si aparece en sus sueños, ¿o no?)... el famoso Jamie Oliver (famoso para los que les gusta ver Fox Life, al parecer). Siendo que tiene bastante buena mano para las recetas, hasta donde hemos probado, decidí que había que intentar hacer estos bellos brownies. Y yo claramente yo no estaba antojada. Jamás. El que se tienta es mi pololo.
Pero bueno, volviendo al tema, hice la mezcla, y cociné un poquito individualmente, como muffins, ya que mi horno se taimó y no quiso prender hasta el día siguiente. Me los llevé calentitos a la casa de Cristóbal, con un poquito de susto, ya parecían estar crudos aun. En fin, no lo estaban, y quedaron buenísimos. Cuando mi familia los probó, arrasaron. Se acabó la fuente enterita.

Ahora, sin más rodeos, la receta que hice yo:

Brownies
Ingredientes:

250 g de mantequilla o margarina
200 g de chocolate amargo en barra, en trozos (este ingrediente se puede SUPRIMIR, no es necesario reemplazarlo con cacao si no tienes chocolate en trozos)
80 g de cacao en polvo (chocolate en polvo amargo)
65 g harina
1 1/4 cucharadita polvos de hornear
360 g azúcar
4 huevos grandes

Preparación:

Precalentar el horno.

Derretir mantequilla y chocolate en trozos (si se está usando no más, sino derretir solo la margarina)


Agregar chocolate en polvo y azúcar.


Agregar harina y polvos de hornear.


Finalmente agregar los huevos y mezclar.

Echar mezcla a molde enmantequillado.


Cocinar hasta que los bordes estén levemente infladitos, y el centro esté aun mojado. La gracia es que queden casi crudos!


Disfrutar, acompañados de un heladito casero quedan increibles!